viernes, 30 de septiembre de 2016

#VDLN - 12

Es ya viernes y...




Dicen que no hay fuerza más grande
que la del pensamiento;
y es allí donde quiero me lleves,
donde deseo me tengas...

...que cuando camines
y tus pies desnudos dejen sus huellas
pienses en mí y en mi piel...
...que cuando el sol esté más alto
y abrase tu cuerpo,
pienses en mí y en el calor de mi voz...
...que cuando pasees en una tarde cualquiera
y el viento roce tu cara,
pienses en mí y en las caricias de mis manos...
...que cuando estés frente al mar
y sientas su fuerza en cada una de sus olas,
pienses en mí...

...y en ti.








jueves, 29 de septiembre de 2016

Debía sacarme ese tipo de nostalgia que se había apoderado de mí. Decidí cocinar, eso siempre me ponía de buen humor y, modestamente, lo hago bien.

No necesitaba la receta, la conocía de memoria. Tenía todos los ingredientes.

Preparé.
Corté y piqué.
Reahogué.
Mezclé.
Salé y condimenté.
Fuego lento.
Probé...

Algo no iba bien. Algo faltaba. O algo sobraba. Pero definitivamente algo no iba bien. Recorrí mentalmente el paso a paso. Nada..., no lograba saber qué era ese algo en lo que me había equivocado. Enfadada arrojé todo. Fui por mi cuaderno y mi biro, tal vez si escribía la receta, recordando la última vez que la hice, lograba ver el error.

Preparar los langostinos; lavarlos y pelarlos... me acuerdo que en ese momento apareciste por la cocina, te me quedaste mirando apoyado al marco de la puerta, sonriendo.
Cortar las cebollas y los zucchini; picar el ajo... te colocaste por detrás mío, tomaste mi mano, oliéndola, y me dijiste cuánto adorabas los aromas de mi piel cuando cocinaba para vos.
Reahogar todas las verduras cortadas anteriormente, y agregar algunos corazones de alcaucil... comenzaste a besarme el cuello, mientras tus manos me rodeaban la cintura.
Mezclar todo para amalgamar... sentía tu cuerpo presionar el mío, tu respiración cálida en mi oído, y esas mordidas a mi lóbulo.
Salar y condimentar con hierbas frescas... tus dedos superaron la barrera de mis jeans para hundirse allí donde saben hacer magia.
Cocinar a fuego lento... me giraste, y mirándome a los ojos dijiste que tenías mucha hambre y ninguna intención de esperar. Tu boca se apoderó de la mía. Tu lengua no dejó ángulo sin saborear. Me alzaste y mis piernas abrazaron tus caderas. Fue en la mesa que saciaste tu apetito, y el mío también.

Y entonces comprendí. Supe dónde estaba el error. Faltaba algo. Ese algo que me faltaba eras vos. Porque nada sabe igual sin vos.






("Algo", haz click para escuchar la canción de inspiración,
39 de 52 para "Contando las semanas" de Sindel.
Estas letras pertenecen a los "Relatos Jueveros" y esta semana la convocatoria
fue hecha por Leonor desde su blog "Mi blog de fotos".
Te invito a leer el resto de los participantes aquí!)



viernes, 23 de septiembre de 2016

#VDLN - 11

Aún es viernes y no dejaré que termine antes de...





"...♫ ...If you say that you are mine
I'll be here till the end of time
So you gotta let me know:
Should I stay or should I go?... ♫..."










jueves, 22 de septiembre de 2016

Una noche. No una como tantas, sino una especial.

No como aquellas que recordaba en la ciudad. Allí donde la oscuridad se rompía por miles de luces y el silencio estaba intoxicado por tantos ruidos. Una noche donde el sólo y único rumor era producido por el viento entre las ramas de los árboles, haciendo música al mover las hojas. Y en esa oscuridad, que todo lo cubre, ella... la luna. La misma que dibujaba los contornos de las montañas contra el muro de la casa. La misma que entraba por la ventana de la habitación, invadiendo cada rincón e iluminándonos.

Iluminaba su cuerpo... en pie, potente, echando una sombra sobre el mío. Una sombra que se movía lenta, como lo hacía él, porque no había apuro. Caminó hacia mí, observándome… deleitándose… como un cazador que sabe de tener ya su presa. Se recostó a mi lado, en esa cama tan grande, tan acogedora, tan nuestra. Su mano comenzó a recorrer ese paisaje que antes había llenado sus ojos. Me envolví en sus brazos y pegué mi boca a la suya. Saboreándolo… mordiéndolo… comiéndolo. Las caderas iniciaron a empujarse una contro la otra. La de él para moverse dentro mío, la mía para seguirle el ritmo y recibirlo en lo más profundo. La agitación de nuestras respiraciones parecía estar acompañada del silbar de ese viento externo. Ese mismo viento que vistió el cielo con una capa de nubes, llevándose nuestras sombras y aquella calma aparente. Una fuerte explosión cubrió nuestros gemidos, y se desató la tempestad.

Las gotas golpeaban sobre los vidrios, al ritmo de sus embestidas. Sus manos en mis cimas, tomándolas… apretándolas... azotándolas como la lluvia hacía con los árboles. Cual trueno rompiendo el silencio, fue mi voz gritando su nombre, cuando su hombría atraversó mi cielo, convirtiéndolo en un infierno. Donde la verdadera tempestad eran las acometidas entre esas sábanas. Su fuerza quebraba mi cuerpo como un rayo; y su amor recomponía mi alma. Envueltos en sudor, en lluvia, nos derramamos. Uno en el otro... ambos.

Una noche, una simple noche... pero no simplemente una noche.


("Simple", haz click para escuchar la canción de inspiración,
38 de 52 para "Contando las semanas" de Sindel.
Estas letras pertenecen a los "Relatos Jueveros" y esta semana la convocatoria
fue hecha por Inma desde su blog "Molí del Canyer".
Te invito a leer el resto de los participantes aquí!)

viernes, 16 de septiembre de 2016

#VDLN - 10

Nuevamente estamos a viernes y...





Ajena;
ni acá ni allá;
fuera de tiempo;
en esta dicotomía constante,
luz y sombras,
fuego e hielo,
guerra y paz...

y no deber explicar[te]
porque (me) sabes,
porque (me) sientes
porque (me) sos...

y porque así [te] soy.














viernes, 9 de septiembre de 2016

#VDLN - 9

Llega el viernes y...




Hoy sólo escucha...
shhh siente...




"...♫ ...y espero que te olvides mi nombre,
espero que las llamas del alba
traigan un rumbo a mi vida... ♫..."



viernes, 2 de septiembre de 2016

#VDLN - 8

Nuevamente viernes y entonces...




"El silencio
es el único que contesta
las preguntas del pensamiento.

Ambos
son cómplices callados
de las palabras."
(cita anónima)



Y en el silencio,
se dicen muchas más cosas que con las palabras...
en él mueren las excusas y las mentiras.
El silencio es un lenguaje
certero,
implacable,
inclemente,
despiadado,
(des)almado...



Si quieres, déjame aquí tu huella...

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