Hubo un tiempo donde
la tierra era habitada por criaturas mágicas y extraordinarias. Ella era una de
éstas. Cuando caminaba sus pies parecían no tocar el suelo, y no por esas
hermosas alas que algunos tenían la fortuna de apreciar, sino por la gracia de
su ser. Una “piccola fata” que parecía danzar en su andar. Sus ojos tenían una
luz especial, pero lo que seguramente iluminaba era su sonrisa... plena,
sincera.
Es por esto que sus
amigos no entendían qué era lo que la tenía tan confundida, y hasta por
momentos, la entristecía.
Tú deberías hacer como
yo, seguir tus impulsos... –decía el dragón mientras se recostaba apoyando la
cabeza en sus patas delanteras. Al fin y al cabo, la vida es una sola y tenemos
que disfrutarla.
¡Qué fácil lo haces!
–sentenció el ogro con voz ronca, siempre tan correcto y moralista. Tú porque
vives enamorado, amigo dragón, y eso no te deja pensar en nada más que en tus
propios deseos; y si bien la vida es una sola, es mucho más que algo tan
elemental y primitivo.
El hombre de hojalata
los escuchaba en silencio, y observaba que ella no decía nada, su mirada se
perdía en ese espectacular manto oscuro que era el cielo de noche.
Cara... hazle caso a
este viejo y experimentado amigo, encuentra tu equilibrio... –le dijo sentándose
junto a ella y alzando la vista al cielo.
No es tan sencillo...
–respondió la pequeña hada con un hilo de voz.
Nadie dijo que lo
fuera... –agregó el hombre de hojalata. Pero dime, ¿cuál es tu nombre?
Luna... –respondió
ella, mirándolo sin entender a dónde quería llegar. ¿Pero qué tiene que ver
eso?
Observa bien el
cielo... allí está por quien te han dado el nombre... tan bella, tan única, tan
especial... –explicaba su amigo.
Tan sola... –remarcó
ella por lo bajo.
No, te equivocas...
–dijo el hombre de hojalata. Mira a su alrededor. Mira cuantas estrellas tiene
haciéndole compañía... ella nunca está sola, y tú tampoco...
Luna danzó y brilló, iluminándolo todo... y a todos.
(Yo he tenido la
suerte de encontrar esta criatura extraordinaria
que muchos conocen como Luna
y que yo simplemente llamo Amiga ♥)
(Este relato pertenece a los "52 retos de 'El libro del Escritor'".
Es el número 12: Combina estos tres personajes a modo de secundarios:
"el hombre de hojalata"; "un dragón enamorado" y "un ogro"
para hacer con ellos una narración fantástica.)
Es un cuento, tiene vida propia con principio y final, estos relatos que nos dejas son todos geniales. Un abrazo Alma
ResponderBorrarAinssssssssss... gracias Ester. Gracias por leerme y por el aprecio que constantemente me demuestras.
BorrarBesos!
Bonito cuento has escrito y dedicado a Lunaroja, quien tiene amigos nunca está solo en verdad.
ResponderBorrarBesos dulces Alma.
Vos sos uno de esos amigos que se hacen sentir siempre, y con los que uno sabe de poder contar.
BorrarBesos grandes y salados como el mar, Dulce... y gracias.
Ay Alma! Qué cosa más delicada y perfecta! Oh qué bonito,qué emoción..tengo un nudo en la garganta.. estoy traspasada de sensaciones, me has llevado de tu mano a un lugar tan maravilloso...
ResponderBorrarQué maravilla verme así a través de tu mirada!
Eres increíble, y hermosa.
GRACIAS CON TODO MI CORAZÓN...
has podido verme tan dentro.
Piccola fata sei tu.
te quiero preciosa mía! Como no te vas a llamar Alma? si estás iluminándolo todo!
La única maravilla es el haber cruzado nuestros caminos, cosa que agradezco cada día... Vos y yo sabemos que para todo hay un motivo, y creo que sea el que sea, es de los mejores.
BorrarTe quiero Ale y ya sabés, esto no termina aquí... jajajajajajajaja!
Besotes enormes mi LunaRoja!!
Mi querida Alma, me has emocionado porque he sentido ese sentimiento que tan bonito has descrito, pero más aún cuando he leído la dedicatoria. Sois dos personas fantásticas... con luz propia y no necesitáis ningún artífice que nos haga llegar a vosotras. Felicidades mis grandes amigas.
ResponderBorrarMil besitos para mi querida Ale y mil besitos para ti, mi preciosa Alma.
ves Auro? tú si que eres grande,generosa y bella! Gracias!
BorrarAuro... sos vos la que me emociona cada vez, con cada mínima palabra, comentario... son caricias y se sienten llenas, llenas de afecto, como sé que lo son... y me siento honrada con tu amistad, de verdad, no imaginas cuánto.
BorrarInfinitos besos gran, gran mujer y amiga... ♥
Que bonito, fantástica dedicatoria, que hermoso es tu corazón amiga Alma Baires tu ser es de una luz muy especial, muy sincera y mas aun hermoso dedicando a Lunaroja otra mujer de un corazón fantásticamente hermoso y sincero como el tuyo, felicidades a ambas, abrazos.
ResponderBorrarGracias Jorge... realmente gracias por la imagen que tenés de mí.
BorrarHe encontrado en Ale, mi querida LunaRoja, una excelente amiga y esto sólo ha sido un detalle para homenajearla.
Besotes!
¡Qué ternurita!
ResponderBorrarMe ha encantado, sobre todo el hombre de hojalata que lejos de estar hueco, está lleno de vida. Y un detalle precioso, tener una luna personal que nos cuide y nos mime, y comparta con nosotros sentimientos y emociones.
Besos enormes.
El hombre de hojalata es la voz de la sabiduría... la experiencia de los años. Y sí, es una fortuna tener a (una) Luna en nuestras vidas...
BorrarBesisssssssssss hermosa!
O (...) Luna
ResponderBorrarstatu variabilis,
semper crescis
aut decrescis;
Oscula
Le gustará... tanto como me gusta a mí.
BorrarBesos.
Hola, Alma:
ResponderBorrarUn gran relato. No sólo por su perfecta secuenciación, quizá lo más atractivo es la intensidad con que lo escribes.
un abrazo, Alma.
Hola Nino... creo que me estimas demasiado. Igual gracias, gracias por tu aprecio que sabes es importante para mí.
BorrarY a ver cuándo nos ofreces otro de tus maravillosos relatos... yo lo(s) espero con ansias!
Besos!
Entre los tres personajes lograron darle un buen consejo.
ResponderBorrarY ella se los retribuyó, al iluminarlos.
Bien contado.
Un abrazo.
Gracias Demi… un super abrazo, paisano!
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