martes, 30 de julio de 2019

Esa mañana cuando abrió los ojos, el dolor le hizo recordar que todo continuaba en el mismo exacto modo que lo había dejado la noche anterior; y que ningún milagro había ocurrido en esas pocas horas de sueño. Miró el celular y respondió al único mensaje que realmente le importaba: “Estoy bien... aquí sigo... no te preocupes...”. Y es que, cómo le explicaba que lo sucedido todos esos meses la había rota por dentro y nada tenía que ver con la fractura de su pie.





(Este microrelato pertenece a “Reto: 5 líneas” propuesto por Adella Brac.
Las palabras son las de los meses de Julio: pie - rota - preocupes.)

Si quieres, déjame aquí tu huella...

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *