Me quedé allí, sin saber qué pensar mientras veía cómo se mecían las hojas que el otoño había sustraído
a los árboles. De repente, todo parecía haber perdido sentido. Los días continuaban a pasar, uno tras
otro. No se detenían, por nada, por nadie. Por otro lado, ¿por qué deberían
hacerlo?, ¿qué deberían esperar? No sabía qué responder, porque tampoco yo
sabía qué debía esperar, o si realmente deseaba hacerlo. Ambigüedad, eso
sentía. Todo y nada.
(Este microrelato pertenece a “Reto: 5 líneas” propuesto por Adella Brac.
Las palabras son las de los meses de Noviembre: mecían - días - pensar.)