jueves, 29 de octubre de 2015

Vecinos

Salí de mi departamento con los minutos contados y el ascensor bloqueado. "Iniciamos bien!", pensé.
Bajé corriendo las escaleras y encontré el motivo de mis obligados ejercicios matinales.
Un nuevo inquilino... –dijo Matilde. Se mudó justo enfrente de tu departamento; se verán desde la cocina… A ver cuándo se te aparece por una taza de azúcar…
¡Qué decís Mati! –le casi grité mientras salía apurada pero con el tiempo de aspirar ese perfume a eucalipto con el que Matilde insistía en limpiar el hall todas las mañanas, y que me transportaba al bosque en Necochea junto a mi abuelo.


Día rutinario, no veía la hora de llegar a casa y sumergirme en la bañera. Ya me imaginaba escuchando música suavecita y el perfume de lavanda de las sales inundando el piso. Pero ese deseo se evaporó apenas salí del ascensor. Adoro Pink Floyd pero en estos momentos Wish you were here me deprimía. Por lo único que no tiré abajo la puerta del vecino, fue por su condición de nuevo. Decidí que una ducha rápida sería lo mejor. Una cena ligera y a dormir. Al menos la readquerida soltería cuidaría mi dieta, siempre hay algo positivo.


6:30am, el despertador… pero mis sentidos comenzaron a despertarse por ese perfume a café que venía de la cocina. Mmmmm… Venecia de su mano. Pero si él ya no estaba, ¿de dónde venía ese aroma que me hizo soñar y despertar de golpe? Fui hasta la cocina y lo ví. Sentado en su ventana estaba él… me vió… levantó su taza saludándome. Me avergoncé de estar fijándolo, me giré y desaparecí… ¡qué tonta!

Me vestí y maquillé lo más rápido que pude, desayunaría al bar, no volvería a pasar por mi cocina en el día de hoy… No quería encontrarmelo nuevamente. Otra vez salí con los minutos contados y ví como iniciaba a cerrarse el ascensor.

¡Momento! –grité y entré como un tornado.
Toda la mañana si fuera necesario... –su voz me golpeó en el pecho y su perfume me inundo, mientras las puertas se cerraban detrás mío, dejándome sin salida ante él. Daniele, un gusto.

Alma... –logré balbucear…


Y ya sabía que estaba perdida… Ese perfume, su perfume; me despertó… Me revivió…






(Este relato pertenece a los "Relatos Jueveros" y esta semana
la convocatoria fue hecha por Dorotea desde su blog "Lazos y raíces".
Te invito a leer el resto de los participantes aquí!)




domingo, 25 de octubre de 2015

Donde se encuentra el alma

Finalmente sábado y el inicio del fin de semana. Estos últimos días fueron de locos por decir poco. Igual estaba ya tan acostumbrado a sus despertares casi al alba que hoy no sería la excepción. Decidió ir a recorrer un negocio del que tanto le habían hablado, donde se pueden encontrar antigüedades y artesanías de muy buen nivel y a un precio conveniente. Jeans y una camisa ligera, aún siendo primavera, comenzaba a hacer un poco de calor llegando el mediodía. Bajó de su departamento y comenzó a caminar, le gustaba pasar esos momentos solo, no depender de nadie, un poco como en la vida misma. Viéndolo así vestido se lo podría confundir con un hombre cualquiera, mejor dicho, por un muchacho. Porque la verdad es que daba una impresión totalmente diferente cuando estaba en su oficina, siempre en traje y corbata, detrás de su escritorio, rodeado de todos sus proyectos. Ese muchacho no era aquel hombre, hoy era un día donde se difrutaría la vida.

Ella se estiraba entre las sábanas de algodón de su cama; le gustaba sentir su cuerpo desnudo a contacto con esa suavidad. Ahora esa piel morena se veía más hermosa con la luz de la mañana que se filtraba por el ventanal. El gato negro a sus pies parecía imitarla; lo había encontrado en la puerta del edificio un año atrás, y fue imposible no enamorarse de esa bolita de pelo. Terminó con ese ritual de sábado por la mañana y se dirigió a la ducha. Comenzó a relajarse bajo el agua caliente mientras con la esponja se masajeaba lentamente el seno, sentía que podría quedarse allí por horas. Después de pocos minutos una nube de vapor lo cubría todo, difundiendo un exquisito perfume de almendras.

Cómo le gustaba caminar por la ciudad a esas horas, sentir el aroma que salía de las confiterías, de las panaderías, de los bares. Las hojas de los árboles aún mojadas por el rocío. El sol ya brillaba y se reflejaba en su cara, calentándola. Una leve brisa jugaba con su pelo, y lo refrescaba cuanto bastaba. Llegó a la avenida, cruce principal de ese barrio, donde los rumores se acentuaban y el ritmo se aceleraba…, y todos los olores y sabores se mezclaban.

Una mano con las uñas largas y con un perfecto french, acomodaba un mechón de pelo rebelde sobre la nuca. Cabellos negros como una noche sin luna, pero que con la luz del sol parecían reflejar el fuego que recorría su cuerpo. El conjunto de encaje blanco sería lo más precioso en su vestimenta ese día, pues tenía pensado salir a dar un paseo y un par de jeans cómodos y su camisa floreada estarían más que bien. Una fresca fragancia la envolvía. Sin más joyas que sus pulseras de plata y esa fina cadena en su tobillo derecho, que apenas se dejaba ver al caminar.

Justo en esa esquina, con una puerta antigua restaurada, de esas que ya no se ven mucho por ahí, se encontraba el lugar del que tanto le habían hablado. El perfume de madera y lavanda que provenía de todo el local invitaba a entrar y perderse en él. Parecía estar recorriendo una casa privada, los muebles y los objetos estaban predispuestos de manera que esa fuera la sensación. Habían varios restaurados de forma impecable, enriquecidos en sus detalles. Una cama con unas rosas talladas en la cabecera, y una finísimas sábanas de lino blancas bordadas, seguramente a mano. Una antigua biblioteca de roble con algunos libros que enseguida curiosó; algún clásico, uno de cocina tradicional italiana…, y unos de literatura erótica que no le pasaron desapercibidos.

Una fina linea negra bordeaba la parte inferior de esos ojos oscuros y profundos. Un poco de rimel en las pestañas, y ese es todo el maquillaje que solía usar. Siempre le había gustado ir más a cara lavada que otra cosa; creía que la sensualidad pasaba por otro lado.


En las paredes habían algunos cuadros, replicas de famosas obras de arte, y algunas interesantes fotografías en blanco y negro. En un
ángulo, dos sillones que se veían muy cómodos, casi que invitaban a sentarse; y una pequeña mesa en medio con una orquídea maravillosa y algunas velas. Un gato negro se cruzó entre sus piernas, casi haciéndolo caer; dirigiéndose hacia una canasta de mimbre con un almohadón rojo muy mullido.

Me disculpe, es el gato de mi hija, la dueña de todo esto; y se ve que él también se siente patrón acá dentro. -dijo una simpática señora detrás de unos anteojos señalando al gato. ¿Usted estaba buscando algo en particular?





jueves, 22 de octubre de 2015

Si sólo lograrás morderte la lengua, finalmente ella se sentirá orgullosa de vos... –le decía para tratar de convencerla, sabía que siempre había buscado su aprobación. Pero aún siendo niña, su espíritu era fuerte y aunque se mordía la lengua, sus ojos gritaban rebeldía.

Si los ayudas con los estudios, seguro te aceptarán... –escuchaba decirse casi al oído. Y si bien era aceptada y querida, ella sentía que no era lo que deseaba. Ella continuaba a ser siempre “la amiga… la simpática… la que sabe escuchar…”, y eso, ciertas veces, no le bastaba.

Si te acercas a su mundo, él se acercará al tuyo... –afirmaba con voz decidida. Pero los años pasaban y por más que ella siguiera sus gustos, él no la acompañaba en las cosas que le gustaban.

Y ella no aprendía, y esa vocecita cada tanto le repetía: “Si fueras más flaca… si fueras una mujer activa, deportiva… si fueras bella… si fueras más disponible… si… si… si…”.

Hasta que un día fue su propia voz la que escuchó: “Si sólo te aceptaras… si sólo te amaras…”, y desde ese momento cambiò, y ya no hubo (auto)chantajes. Comenzó a ser, dejando los “si…” que usaba como excusas, como escudos, cambiándolos por los “sí!. Dejó de sentirse culpable por lo que no era, por lo que no quería, por lo que no sentía.

Empezó a quererse y respetarse por lo que sí era...., e inició a ser feliz.


(...aunque hay veces que aún se le olvida.)




(Este texto pertenece a los "Relatos Jueveros" y esta semana
la convocatoria fue hecha por Pepe desde su blog "Desgranando momentos".
Te invito a leer al resto de los participantes aquí!)




sábado, 17 de octubre de 2015

Despierto. No te veo, pero siento tu calor.
Me giro y ahí estás…, aún duermes. Adoro observarte mientras lo haces.
Desnudo, las sábanas apenas te cubren un poco más arriba de las piernas.
Tu espalda, ancha, fuerte…, la tela donde dibujo con mis uñas.
Estás tranquilo…, relajado…, inconscientemente sensual.
Huelo tu perfume, el que emana tu piel. Y comienzo a acariciarte.
Te mueves. Estiras las piernas. Hundes tu cara en la almohada, rodeándola con tus brazos.
Deslizo mi mano por debajo de tu nuca. Mis dedos te recorren, lentos, hasta la cintura.
No te mueves.
Entonces, vuelvo a marcar el camino de vuelta…, lenta…, delicadamente.
Suspiras y te giras sin abrir los ojos. Tal vez sólo simules que duermes…, no importa.
Te deseo.
Me acerco más. Colocas el brazo por debajo de tu cabeza. Sí, tal vez no duermas, tal vez sólo estés a la espera…, a la espera de mí.
Tu pecho, mi refugio. Juego con tu vello.
Desciendo por tu vientre, y me detengo en tu ombligo. Diseño círculos a su alrededor.
Tu respiración se agita. Me detengo antes de llegar hasta tu sexo.
Mis latidos se aceleran por la excitación. Pulso.
Mi mano alcanza tu miembro. Duro…, erecto. Lo acaricio. Suave.
Cierro los ojos y me muerdo el labio. Me subo a tu cuerpo. Me empalo a tu sexo. Te siento invadir mi húmeda cueva.
Aprietas los ojos, como aferrándote a un sueño.
Entonces tus manos toman mis caderas. Me acompañan en el movimento.
Entre ahogados gemidos alcanzamos juntos el orgasmo.
Me dejo caer en tu pecho.
Aún sin abrir los ojos, me abrazas.

Y me tienes…, me tienes unida a ti y a tu sueño.




jueves, 15 de octubre de 2015

Ella comenzó a llorar.
Como cada vez que debía darle la espalda y volver. Dejándolo allí.
Sentía un dolor tan grande al hacerlo. Algo tan profundo e inexplicable. Como si hubiese nacido dentro de él.
Y las lágrimas continuaban a rodar silenciosas por su rostro. Hasta que una llegó a sus labios. Sintió que era salada. Y aquello la hizo sonreir.
No necesitó preguntar, su corazón infantil ya había encontrado las respuestas. Su alma tenía, sentía, cuál era la explicación.
Él estaba dentro de ella. Seguía protegiéndola, cubriéndola.
Cuando llorase, él limpiaría y curaría sus heridas. Él, en sus lágrimas, le recordaría que todo pasa. La haría pensar a sus mareas; a sus más fuertes tempestades y como luego llega la más profunda calma.
Él la acompañaría siempre y ese era su modo de recordárselo. La sal de sus lágrimas eran la prueba de que él formaba parte de ella.
Él era, es, y será siempre, la esencia de (su) Alma.




(Este texto pertenece a los "Relatos Jueveros" y esta semana
la convocatoria fue hecha por San desde su blog "Y nacimos casualmente".
Te invito a leer al resto de los participantes aquí!)



jueves, 8 de octubre de 2015

Extra... extra!!!





(Este texto pertenece a los "Relatos Jueveros" y esta semana
la convocatoria fue hecha por Pikxi desde su blog "La guarida de las locuras".
Te invito a leer el resto de los participantes aquí!)



martes, 6 de octubre de 2015

Historias de Ninfas...

...que se encuentran paseando una tarde de domingo.

Dicen que la superficie de los lagos de montaña pueden teñirse de verde, de azul o de negro, pero sólo aquella del Lago de Carezza refleja todos los colores del arcoiris.


Lago de Carezza, Nova Levante, Provincia de Bolzano, Trentino Alto Adige, Italia


Los "Dirlinger", un legendario pueblo de mineros, a este propósito cuentan la siguiente historia:

"En el lago vivía un tiempo una hermosísima ninfa, a la cual le encantaba sentarse cercana a sus bordes a cantar. Pero como era muy tímida, apenas alguno se acercaba a la orilla, volvía a zambullirse rápidamente en el agua.
Un día pasó por los alrededores el brujo de Masaré y escuchó a la ninfa cantar. Enamorándose perdidamente, intentó envano de secuestrarla haciendo apelo a todas sus artes mágicas.
La bruja Langverga entonces le dió este consejo: 'Extiende un arcoiris desde el Latemar hasta el lago, así provocarás la curiosidad de la pequeña y la atraerás fuera del agua. Pero tú deberás transformarte en un viejo mercader y contarle, de modo aparentemente casual, que del tejido del arcoiris se obtienen preciosísimas joyas. Cuando ella se haya acercado lo suficiente, podrás finalmente capturarla sin dificultad.'
El brujo siguió el consejo pero olvidó lo de transformarse. De ese modo, la ninfa enseguida lo reconoció y se sumergió en el lago, desapareciendo para siempre de su vista. El brujo, enfurecido, rasgó el arcoiris del cielo y lo lanzó al agua. Pero éste se disolvió, extendiendo sus colores sobre la superficie del lago, que desde entonces los 'ladinos', habitantes de la zona, llaman 'Lago del Arcoiris'."




(El fin de semana mientras paseaba por estos hermosos paisajes, me "encontré" con esta historia, mágica leyenda, y me acordé de un amigo al que le dedico especialmente esta entrada. Para vos Demiurgo, espero te guste... un beso.)


domingo, 4 de octubre de 2015



No me desafió, él sólo trajo "la pelota"... y a mí me encanta jugar a estas cosas.
Él, Syd, alguien a quien tengo el honor de llamar amigo, lanzó este desafio para el fin de semana..., y me dije "¿por qué no?"..., una forma para conocer(se) más.

Haré cómo hizo él, pondré el título y su autor para cada canción y el video correspondiente. Y como digo siempre, si te gusta, copias la idea y la llevás a tu casa..., y si querés, me avisas aquí..., voy a visitarte y escuchamos música juntos.


(Desde ya pido disculpas por mi absoluta incapacidad para ser "resumida".)


Perfecta para dedicar: aquí podríamos detenernos a pensar, ¿dedicar a quién?, ¿por qué motivo?... pero bueno, pongo una que me gusta particularmente y he dedicado...





Que te recuerde a alguien: yo soy de las que tiene una canción para cada persona que quiere... ésta es especial... esta es Ella... mi raíz...
Honrar la vida - Eladia Blázquez (autora) Marilina Ross (intérprete)




De un artista poco conocido: el tema de ser "conocido" es delicado... ¿conocido dónde?... puedo nombrar una banda o artista muy conocido en Argentina y ser totalmente desconocido para el resto del mundo... en general, sudamérica tiene una gran cultura musical, sea local que extranjera, cosa que no sucede muy a menudo con los europeos en cambio...
Percussion baby - Sumo




Para llorar: una canción que me emociona hasta las lágrimas siempre, desde la primera vez que la escuché siendo aún muy chica, y sin entender nada de italiano aún... y no sé el por qué, simplemente "la siento"...
Caruso - Lucio Dalla




Para levantar el ánimo: ...el mío seguro! ...cantándola a gritos con mi mejor Tarzán's english!
I will survive - Gloria Gaynor




De un artista de tu país: ...qué difícil elegir sólo una!!! ...y es qué, modestamente, mi país dió a la luz genios de la música!
Muchacha ojos de papel - Luis Alberto Spinetta




De tu artista favorito: ...sin pensarlo dos veces.
Who wants to live forever - Queen




De la cual amas su video: ...muchos ...uno de los últimos.
She wolf - David Guetta feat Sia




Que sea tu placer culposo: ...no hay música que escuche con culpa ...por una cosa u otra me gustan, me hacen soñar ...algunas dedicadas, y que las hacen especiales.
Amarte es un placer - Luis Miguel




De un soundtrack: ...amante del séptimo arte como soy, es muy difícil elegir una ...pero una que significa mucho en mi historia personal.
Love theme de "El Padrino" - Nino Rota




Que sea un cover: ...no gustándome los covers, debo admitir que éste es uno de los mejores.
Nothing compares to you - Prince (autor) Sinead O'Connor (intérprete)




Con la que te identificas: ...desde siempre, como si hubiese nacido "vieja".
A mi manera (My way) - Paul Anka (autor) Maria Marta Serra Lima (intérprete)




Que te transporta a tu infancia: ...indiscutiblemente esta canción me lleva al salón de mi casa y al "combinado" de mis papis.
How deep is your love - Bee Gees




Que consideras una obra maestra: ...sin discusión posible (Syd ...en ésta coincidimos, aunque en otra categoría.).
Comfortably numb - Pink Floyd



Sorpresa: ...es que me divierte tanto.
Se dice de mí - Tita Merello



...si llegaste hasta acá, te digo gracias ...y te dejo un sonoro beso!



jueves, 1 de octubre de 2015

Años atrás se me dió la posibilidad de elegir una palabra, un nombre, un nick, algo que me identificara. Que fuera Yo, más allá de documentos, nombres propios, apellidos adquiridos, genética, números Y me fue tan natural Salió de mis labios Y mi mano la escribió como si siempre lo hubiese hecho.
Alma.
Esa parte inmaterial del ser, que siente y que está en contraposición a la parte racional, como la define un diccionario. Y es que esa soy, aquí, y allá también.
Ella soy cuando escribo, cuando me expreso.
Alma que siente.
Alma que sueña.
Alma que vive.
Alma que ama, sufre, se ilusiona, se descepciona, rie, llora, grita, y queda en silencio.
Alma que sube... y baja... Alma que va... y viene... pero Alma que sabe permanecer.
Alma niña y Alma mujer.
Alma que es más que un concepto, es más que su convencional significado.
Alma (es lo que) soy.




(Este texto pertenece a los "Relatos Jueveros" y esta semana
la convocatoria fue hecha por Casss desde su blog "El balcón de Cas".
Te invito a leer al resto de los participantes aquí!)





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