Hoy quiero
escribirte. Sí, a vos...
Sé que no hace
falta, que vos me conocés mejor que nadie, pero lo necesito. Necesito poner en
palabras lo que tantas veces hubiese querido decirte.
Necesito pedirte
disculpas porque tal vez no fui todo aquello que vos esperabas. Disculpas, por
no haber perseguido esos sueños que habíamos construido. Por haberme
quedado escondida detrás de mil excusas. Por todas esas veces que no exploté, y
callé..., callé por no lastimar, y terminé lastimándote a vos. Y me llenaba, me
llenaba de angustia y de lágrimas reprimidas, para vaciarme luego… Y así continué
por mucho tiempo.
Necesito pedirte
disculpas porque no te dí el valor que vos merecías. Por haber aceptado las
miradas de los otros, dejando que dijieran quién era..., cómo era. Pedirte disculpas
por amar a todos menos a vos, o al menos no amarte lo suficiente. Porque
siempre puse a los demás por delante tuyo…
Pero vos sabés que
cambié, y si lo hice, fue por vos; porque finalmente te vi… Y así, me vi…
Me vi en esos ojos
oscuros, tan grandes cuando se asombran, tan chiquitos cuando se emocionan. Me iluminé
con esa sonrisa, me sentí plena en ella. Y ya no vi sólo tus defectos, pude ver
lo bueno…, pude ver la belleza. Por primera vez me enamoré de esa imagen, me
enamoré de esa mujer que veía en el espejo…
Y empecé a amarte… A
amarme.
(Este relato pertenece a los "Relatos Jueveros" y esta semana
la convocatoria fue hecha por H... Perla Gris desde su blog "Et lux in tenebris lucet...".
Te invito a leer el resto de los participantes aquí!)
Me parece que tus disculpas serán aceptadas. Es muy valioso el planteo que hiciste.
ResponderBorrarBesos.
Espero que sí Demiurgo, pero sobre todo, espero finalmente haber aprendido.
BorrarUn beso y un gran fin de semana.
Uno no puede amar sanamente, dicen, si no aprende a reconocerse y a amarse como se es, como se quiere ser. Muy profundo el espíritu de esta carta que nos dejas.
ResponderBorrarUn abrazo
Eso dicen... eso es lo que creo, y que he tardado, pero aprendido.
BorrarGracias Mónica por tu huella, un beso.
Alma tu carta... ufff, tu carta me ha tocado la patata, me ha llegado muy hondo pues mirarse al espejo y quererse y decir me quiero... mirarse al espejo y reconocerse ya es todo un logro imagina quererse y decirlo a los cuatro vientos... A veces leer a los juever@s es escucharse a una misma... unas veces porque escriben cosas que tú habías pensado, otras porque a pesar de ser tan distintos pensamos parecido... en fin...
ResponderBorrarGracias por participar en este jueves, tu aporte es muy bueno...
Besines...
Piccola, a mí me toca tu huella aquí ...pero esto ya lo sabes
BorrarA mí me costó mucho, muchísimo, mirarme a lo espejo ...y más aceptarme y quererme. A mí también me pasa eso con los Jueveros, y si hoy estoy acá participando cada jueves con este grupo, debo agradecértelo a vos...
Besos ...y un abrazo fuerte fuerte, con toda (el) Alma.
Nada como mirar al espejo y reconocernos, aunque para eso hayamos roto dos mil antes y derramados quintales de sal líquida. El camino hasta ese reencuentro con nuestro yo verdadero siempre merece la pena a pesar de lo angosto del mismo y de las vicisitudes que para ello hayamos tenido que pasar.
ResponderBorrarSiempre, siempre merece la pena el más pequeño esfuerzo al más grande, por un@ mism@ porque para que los demás te vean, primero debe saberse mirar uno.
"Conversaciones con mi yo". Así podría ser.
Un beso muy, muy, muy grande y un abrazo mayor.
Ya lo sabes :-) y lo sabemos... por todo y por más.
¿Dos mil? ...he perdido la cuenta de cuántos fueron, pero sí, valió la pena. Tú sabes que llevo muchas conversaciones con mi yo ...y cuando me agoto, sigo con mi otro yo, o sea Tú!!!
BorrarUn besote enorme ...por todo y más. ;)
Siempre es buen momento para amarse a una misma.
ResponderBorrarUn beso.
Así es Fabián, siempre ...por suerte.
BorrarUn beso.
Has optado por lo más valioso y lo más difícil de hacer, conocerse, amarse y pedirse perdón.
ResponderBorrarMe ha gustado mucho.
Gracias Tracy... no fue fácil pero valió la pena sin dudas.
BorrarUn beso.
Que mas puedo decirte sino que es una carta muy sentida, una completa declaración de amor..el amor que debería imperar antes que cualquier otro..porque quien no se ama a uno mismo no puede amar a nadie mas...y tú no solo te enamoraste de la mujer del espejo sino que amaste su alma..porque la belleza del cuerpo, los ojos, la boca..todo desaparece, mientras que el alma buena, bella, queda intacta por siempre...brindo por ese amor---besos
ResponderBorrarPor primera vez pude conciliar la imagen de (esa) Alma con el reflejo que me daba el espejo... no fue fácil, y a veces aún cuesta... pero como ya dije, valió la pena.
BorrarBesotes Mirella.
Amarse, reconocerse tal como uno es, se vuelve fundamental para poder relacionarse con el exterior. Todo comienza por uno mismo.
ResponderBorrarBesos dulces
Y no imaginas cuánto me costó comprender algo tan fundamental... pero necesario.
BorrarUn beso salado como el mar y que tu fin de semana sea todo lo que te mereces, es decir, mucho!!!
Que bello Alma asi hay que amarse desde lo mas profundo
ResponderBorrarBesos muy dulces
Sí que es bello Slave, aunque me ha costado hacerlo, ahora que aprendí, lo disfruto.
BorrarBesitos salados para vos.
Lo más importante no es pedir perdón si no tener el valor y la confianza de mirarse al espejo.
ResponderBorrarA tus PIES
Ainssssss Gude... valor... qué palabra! ...lo he tenido para tantas cosas, para otros, pero nunca para algo tan simple como mirarme al espejo ...al menos hasta ese momento.
BorrarUn beso.
Tienes razón, a veces nos queremos poco, y hemos aprender a querernos más, quiizás es la mejor manera de empezar a cambiar.
ResponderBorrarUn abrazo
Para mí fue la única manera de cambiar, cambiar realmente.
BorrarUn beso Carmen.
Amarse a uno mismo... nos olvidamos cada día... anteponemos a todos y a todo antes que nosotros, amarse y aceptarse con toda la gama de colores.
ResponderBorrarSimplemente me encantó tu auto-misiva.
Mil besitos, preciosa.
Anteponemos olvidándonos de nosotr@s mism@s... pero un día despertamos y todo cambia... por suerte.
BorrarInfinitos besos Auro, y mi eterno agradecimiento.
Esta muy bien pedir perdón por lo que no hicimos bien, como esta muy bien saber perdonar. Pero mucho mejor está amar y sobre todo amarnos, porque si nos amamos y nos perdonamos a nosotros mismos sabremos amar y perdonar a los que nos rodean.
ResponderBorrarBesos Alma.
Yo tardé años en comprenderlo... pero lo logré, y valió la pena.
BorrarUn beso San.
Me ha emocionado tu carta Alma porque sé muy bien de lo que hablas. Hay que aprender sobre todo a quererse y a aceptarse uno mismo para que los demás lo hagan, pero a veces resulta muy difícil por no decir imposible.
ResponderBorrarUn beso
Así es Charo, el camino no fue fácil, como no lo fue el cambio... pero el amor, el verdadero, todo lo puede... o eso quiero seguir creyendo.
BorrarUn besote!
Me encantó Alma, me gustó mucho esta carta que desea reconocer y valorarse a sí misma como persona. Hay que verse más al espejo y quererse. Algún día también yo me miraré.
ResponderBorrarUn abrazo.
El día que lo hagas José, seguramente verás a un ser estupendo.
BorrarUn beso y un fuerte abrazo.
Es importante aceptarse tal y como uno es. Y cuando pasa, tu forma de ver el mundo cambia totalmente.
ResponderBorrarUn saludo
Muy cierto Pikxi, mi forma de ver todo y a todos, ha cambiado y mucho.
BorrarUn beso.
Hola. Me ha parecido una carta contundente, llena de emociones y de un sicero arrepentimiento seguido del nacimiento de nuevos y muy valioso sentimientos. Espero que tus disculpas sean aceptadas y que no pierdas el aprendizaje logrado.
ResponderBorrarSaludos, que tengas excelente inicio de semana.
Hola Sergio. Gracias por tus palabras; y sí, las disculpas fueron aceptadas y las que ayudaron a un gran cambio... no, no se perderá lo aprendido hasta ahora.
BorrarUn beso y que esta semana también sea grandiosa para vos.